Siempre
hay melodías que logran rebobinar el tiempo, especialmente cuando has terminado
una etapa amorosa en tu vida. Hay veces que anhelas que alguien logre entender
tu dolor y toque lo mas profundo de tu corazón, y es raro
encontrar una lírica que cree ese efecto, pero cuando escuchas a Natalia
interpretar cada una de las canciones de Hasta la raíz, sabes que ella al
igual que tú, ha soñado, llorado y encarnado el amor verdadero que a pesar de
que ya no está a tu lado, ha dejado marcas en la piel que perdurarán por
siempre.
¿No
has sentido que cuando tienes ganas de llorar, la música es tu mejor amiga
y
te acompaña siempre en los momentos más tristes y felices de tu día? ¡Yo sí! Y debo confesar que hace poco me encontraba en uno de esos instantes que te
quitan el aliento y no te dejan otra salida que desahogar tu soledad en
silencio. Así fue como escuché Hasta la raíz, cada nota y cada estrofa
me decían a gritos lo que estaba sintiendo y entre más canciones escuchaba, más se acrecentaba la emoción en mí, hasta que las lágrimas terminaron
saliendo solas.
Esa
no fue la primera vez que Natalia logro aflorar emociones en mi piel. ¿Nunca
han sentido un cosquilleo de esperanza al escuchar "Un derecho de
nacimiento”? ¿Qué tal ese sentimiento de independencia al escuchar "En el
2000"? Desde entonces Nat nos ha
regalado sus emociones y sentimientos a través de dulces y originales melodías,
pero nunca me había sentido tan identificada con ella como ahora.
La próxima vez que escuches Hasta la raíz, cierra los ojos y atrévete a ser Natalia por una vez,
acompáñala en doce grandiosas melodías en las que descubrirás sus
sentimientos más puros escondidos entre notas y letras que reflejan la
honestidad de su corazón a través de una luz que ilumina.
Por: Miriam Alvarado